La ciencia del comportamiento animal

Me decido a escribir sobre este tema tan sensible a tenor de un caso clínico comentado por una compañera, un cachorro de perro de 7 meses de vida que, al que no han llegado a tiempo para ayudarle a controlar y eliminar sus problemas de agresividad hacia las personas de su núcleo familiar y fuera de él.

ciencia comportamiento animalEs cada vez más amplia la oferta en redes sociales y cursos online de consejos y talleres para resolver problemas en las mascotas de conductas indeseadas por los humanos, sobre todo en perros. Muchos tutores de mascotas desconocen que la Etología es una especialidad veterinaria para el estudio y posterior tratamiento clínico de estos problemas de conducta. El comportamiento de los animales domésticos y mascotas siempre ha sido estudiado por veterinarios.

En casi todas las ciudades hay compañeros veterinarios que se han especializado en esta ciencia del comportamiento. Es muy importante el trabajo conjunto de adiestradores formados acompañando al veterinario etólogo. Para hacer un símil que pueda hacer entender el buen resultado de este tándem entre profesionales, lo voy a comparar con la actuación de un médico especialista en traumatología y un fisioterapeuta en el tratamiento de una lesión ósea o muscular. ¿No es mejor el resultado si ambos trabajan colaborando según su especialidad y conocimientos sobre un mismo paciente? En muchos casos es necesario el uso de fármacos para ayudar a ese animal a controlar sus emociones antes de empezar a trabajar con él y ayudarle a reconducir su comportamiento con éxito. En mi consulta encuentro mucho rechazo por algunos tutores a medicar a sus animales para ayudarles en sus problemas de interacción con su entorno.

No existen perros malos. El ambiente que rodea a ese animal, junto con la edad del destete de su madre y la genética por supuesto, condicionan su comportamiento con todos los seres que le rodean, entre otros muchos factores. Los veterinarios clínicos detectamos esos problemas muchas veces en las primeras visitas a la consulta con el cachorro. Es muy importante la información a los tutores por parte de los veterinarios clínicos para asesorar y detectar problemas indeseados desde tempranas edades y la derivación a veterinarios etólogos o adiestradores que puede cambiarles la vida a todos los miembros de esa familia.

Y no sólo ocurre con perros, con los gatos también existen problemas de convivencia. En la mayoría de las ocasiones por el desconocimiento en la forma de relacionarse y comunicarse de esta genial y maravillosa especie, de su naturaleza felina.

Siempre digo que los seres humanos somos muy torpes a la hora de observar e interpretar la forma de comunicarse con nosotros otras especies animales, entre ellas nuestras mascotas. ¿Cuántas veces interpretamos comportamientos y gestos de nuestras mascotas como si fueran niños o personas adultas, los humanizamos?. ¡Y lo rápido que nuestras mascotas aprenden a interpretar nuestro lenguaje corporal y detectar nuestras emociones!

Tenemos mucho que aprender de ellos y sobre todo a respetar su naturaleza.